El próximo 30 de julio se celebrará el Gran Premio de Hungría, 11ª cita del Campeonato Mundial de Fórmula 1 2017.

La competición se disputará en el circuito de Hungaroring, a las puertas de Budapest, y suele estar considerada como una de las carreras más difíciles para el público y para los pilotos, tanto por las altas temperaturas que suelen acompañar a esta manifestación como por lo sinuoso del trazado, que cuenta con pocas zonas para adelantar. Todo ello contribuye a aumentar el estrés de los monoplazas y los pilotos. Y si esto no fuera suficiente, podemos añadir la naturaleza polvorienta del terreno y el uso poco frecuente del circuito durante el resto del año. Por esto el trazado es conocido últimamente por el gran número de accidentes que se producen. Accidentes espectaculares pero, por fortuna, sin graves consecuencias para los pilotos si exceptuamos el dramático episodio de Felipe Massa en 2009.

Durante las pruebas de calificación, un amortiguador del monoplaza de Barrichello que precedía al de Felipe le golpeó en el casco a 280 km/h, causándole graves heridas que le obligaron a retirarse de las carreras durante un año.

Un circuito “difícil” donde la seguridad y la prevención ocupan un papel fundamental en la organización de las manifestaciones.

Por ello, gracias a Verbis Kft (uno de los distribuidores oficiales de DIECI en Hungría), también este año dos vehículos DIECI (un Agri Plus 40.7VS y un Agri Star 37.7) formarán parte del equipo de urgencias y recuperación durante el Gran Premio de Hungría.

A diferencia de otros circuitos en los que la recuperación de los vehículos está gestionada directamente por los organizadores, en el Hungaroring, el servicio está dirigido por una asociación externa que todos los años pone a disposición los medios de forma gratuita con fines publicitarios.

En 2015 Peto Vilmos, el titular de Verbis, ofreció un Agri Max y un Agri Pivot, que fueron utilizados tanto durante el Gran Premio de Hungría como durante el WTCC (el Campeonato Mundial de Turismos) y otras manifestaciones del mundo del motor que se celebran en el trazado húngaro.

Una vez más, el Sr. Vilmos en persona se pondrá a los mandos de los vehículos con la ayuda de su compañero Lajos Kiss, una pareja unida por la pasión y los años de experiencia en los circuitos húngaros. Una pasión que implica mantenerse al paso con las actualizaciones continuas de las normas, de los protocolos de intervención y de las innovaciones técnicas de los vehículos, que según los datos proporcionados por la FIA (Federación Internacional del Automóvil) este año alcanzan una velocidad media en curva un 40% más alta, un dato aparentemente poco significativo, pero que incide en toda la organización de las competiciones y de la gestión de las urgencias.

Apuntémonos la fecha del 30 de julio para ver en acción nuestros vehículos, ¡tanto los Rojos como los Amarillos y Negros!